Ubicado al pie de la sierra de la que toma el nombre, a 50 kilómetros de Pamplona y a 16 kilómetros de Sangüesa, el monasterio de Leyre esconde magníficos tesoros como la cripta del siglo XI, la bóveda gótica o la «Porta Speciosa«, un perfecto pórtico románico del siglo XII.
Una atmósfera de paz y serenidad que invita al reposo del espíritu, a la reflexión y a la paz interior; una arquitectura austera, que cristaliza en los muros una parte importante de la historia, la cultura, el arte y el pensamiento; una sorprendente naturaleza que invita al paseo y a la meditación; sobrecogedores cantos gregorianos; y la conversación con los monjes benedictinos son algunos de los atractivos que permanecerán en tu memoria tras visitar el monasterio de San Salvador de Leyre. Uno de los conjuntos monumentales más atractivos y entrañables de Navarra. Y tumba de reyes navarros.